Isabel y Mauricio emigran por amenazas
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Para proteger su integridad, pareja de empresarios caleños
debió salir del país por parte de grupos al margen de la ley, debido a
persecución por motivos relacionados con su obra social apoyando
manifestaciones del paro nacional. Sus pretensiones eran en buscar formas de
diálogo y persuadir a que no hubiera disturbios, lo cual les originó
persecución política.
Isabel Cristina Castaño y Mauricio Galvis Díaz, residentes
en el barrio Granada, calle 15 A y avenida 9 norte, manifestaron “tenemos hace
15 años una empresa dedicada a instalar, reparar y vender sistemas de seguridad
electrónica como cámaras, alarmas, redes, controles de acceso para empresas y
casas y otras ocupaciones afines. El radio de acción de la empresa es Cali,
Dagua, Yumbo, Calima Darién y capitales colombianas, instalando equipo de
protección en empresas que en su mayoría tienen problemas de seguridad.
Según Isabel, “mi esposo y yo apoyamos las marchas de protesta
de 2019 y 2021 que generaron el paro nacional. Buscamos apaciguar ánimos de
manifestantes, Por la cercanía de nuestra vivienda al lugar, en ocasiones nos
tocó correr y ocultarnos para proteger nuestras vidas por detonaciones.
Sobre su labor social, dice Isabel: “trabajamos en
actividades de asistencia social en zonas rurales de Pradera y cinco municipios
más, en compañía de familiares y amigos. En Cali, trabajamos en el barrio
Manuela Beltrán y sectores vecinos, apoyando a varias Ongs, de apoyo a la
infancia y en redes de animalistas”.
Durante varios años, agrega Isabel, “pertenecí a la brigada
de emergencia de la empresa en labores de primeros auxilios y brigadas de
seguridad industrial en la Fuerza Aérea Colombiana”.
Su situación de vulnerabilidad, se les originó al realizar
labores de limpieza ambiental en los farallones de Cali, combinadas con la
labor realizada de persuasión y pacificación durante el paro nacional, viéndose
precisados a abandonar el país, debido a persecución por motivos políticos por
grupo al margen de la ley.
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